Marsella - La ciudad más antigua de Francia

Situada en la costa sur de Francia, equidistante de Montpellier y Niza, la ciudad portuaria de Marsella es la ciudad más antigua de Francia y una de las más antiguas de Europa Occidental. Fundada originalmente en el año 600 a.C. por los griegos con el nombre de "Massalia", la ciudad portuaria se convirtió rápidamente en una de las rutas comerciales más importantes de esa época y desempeñó un gran papel en la civilización del Mediterráneo. Hoy en día, la historia de la ciudad como próspero puerto comercial se mezcla con aspectos más modernos para hacerla una ciudad atractiva, hogar de bares elegantes, restaurantes independientes y multitudes de tiendas. Entre las bulliciosas zonas portuarias y los imponentes edificios, Marsella ofrece a los visitantes una magnífica mezcla de lo nuevo y lo viejo. Visitar Marsella es una verdadera delicia, y aunque la ciudad en expansión alberga muchas joyas ocultas y monumentos antiguos, sigue siendo el Viejo Puerto el que atrae a los visitantes desde el siglo XX.​

Marsella - La ciudad más antigua de Francia

Lo que necesita saber sobre Marsella
Marsella está formada por un total de 16 distritos, siendo el distrito 1 el que alberga la mayoría de los sitios principales de la ciudad, incluyendo el Viejo Puerto. Sin duda pasará mucho tiempo en él, pero vale la pena investigar los distritos circundantes antes de ir allí. Otros distritos populares son los distritos 7 y 8, siendo este último un barrio rico donde se encuentran los castillos del Parque Borely del siglo XVIII, un lugar que merece ser visitado y además se llega fácilmente en trasporte público. Para más información sobre lo que pasa en cada uno de los distritos de Marsella, recuerde pedir consejo a los habitantes tan pronto como llegue.

Cosas que hacer en Marsella
La lista de cosas que hacer y atracciones para ver en Marsella es interminable y todo viajero encontrará lo suyo. Si es usted un amante de la cultura podrá visitar las galerías de arte más modernas de la ciudad, como La Friche, una galería contemporánea ubicada en una antigua fábrica de tabaco. Si por lo contrario es usted un aficionado de la historia, se verá encantado al conocer la isla donde se encuentra una fortaleza antigua. Como lo puede ver, Marsella lo tiene todo.

Para orientarse, empiece dando un paseo por el Viejo Puerto que se encuentra en una zona muy concurrida al final de la Canebière, la principal calle comercial de Marsella. Gran parte del puerto es zona peatonal desde 2013, lo cual facilita la exploración de la zona caminando. Tómese su tiempo para contemplar a los pescadores locales descargando sus presas del día o para examinar la cantidad de restaurantes de mariscos ubicados en el paseo marítimo. Le Panier, el casco antiguo de Marsella, es otro buen punto de partida para visitar a la ciudad, ya que la zona tiene un carácter particular. También podrá perderse por las estrechas calles entrelazadas y disfrutar de una bebida, tranquilamente sentado en una terraza.

La Catedral de la Major y sus magníficas torres vestidas de cúpulas, también deberían estar en su lista de cosas para ver en Marsella. Esta impresionante catedral católica romana es un monumento nacional de Francia y una de las iglesias más grandes del país (Marsella parece vivir con la filosofía "ve a lo grande o vuelve a casa"). Es imposible pasar por alto esta imponente estructura que se puede ver a lo lejos, desde el Puerto Viejo.

El Château d'If es otro edificio impresionante de la ciudad. Para echar un vistazo a la fortaleza, tendrá que mirar hacia el mar. Situado solo a 1,5 kilómetros de la bahía de Marsella, el Château d'If es una histórica prisión insular que fue el escenario de la novela más vendida de Alexandre Dumas, "El Conde de Monte Cristo".

Si su deseo más preciado es sentir el viento en su cabello y la frescura del Mar Mediterráneo en su piel, tome un barco hacia las Calanques, un salvaje parque nacional que se extiende desde el distrito 9 de Marsella, hasta la ciudad de Cassis. El acceso al parque se realiza preferentemente en barco, sobre todo si quiere disfrutar de la magnífica vista del macizo salvaje y de la costa con aguas transparentes. Con la ayuda de FranceRent, puede elegir entre una visita guiada en barco, un paseo en barco privado o alquilar un yate.

No nos olvidemos de la rica historia de Marsella como ciudad portuaria. Puede que quiera visitar el museo más antiguo de la ciudad, el Palais Longchamp. Allí también se puede visitar el Museo de Arte y el Museo de Historia Natural de Marsella. Si los museos no son de su interés, vale igualmente la pena dar un paseo por el espléndido Parque Longchamp, cuya belleza es apreciada por muchos.

La Basílica de Notre Dame de la Garde es otro lugar interesante para visitar. También están el cercano archipiélago de Friuli, al que se puede llegar en barco, y el centro cultural barroco, conocido como La Vieille Charité.

Experiencias memorables en Marsella
Para que su estancia en Marsella sea inolvidable, opte por una experiencia cultural como asistir a un evento artístico en una fábrica de tabaco (La Friche), descubrir la cocina afro-francesa en un restaurante de lujo en el barrio de Cours Julien o disfrutar de una buena bullabesa, el tradicional y muy apreciado guiso de pescado provenzal.

Museos en Marsella
Hay varios museos notables dispersos por la ciudad, entre ellos el Museo de la Civilización Europea y Mediterránea. También puede visitar La Maison de la Boule, un mini-museo gratuito que destaca la historia del deporte tradicional francés de la petanca. El Museo Grobet-Labadie presenta el, la vida y el hogar del rico empresario francés, Louis Grobet.

Si busca experiencias más memorables podrá, por ejemplo, ver el amanecer sobre la ciudad y si no es usted una persona que le gusta madrugar, también podrá aprovechar la hora azul, cuando la luz del día se transforma en la oscuridad de la noche. Verán cómo una a una, las luces de los restaurantes de la costa iluminan Marsella.

La ciudad más antigua de Francia es un lugar potente y con mucho potencial. Los 16 distritos que la componen tienen una historia que contar y un patrimonio influenciado por los griegos y la cultura moderna. Si está buscando una ciudad costera donde el lujo de la Riviera Francesa se mezcla con la finura, y la diversidad cultural de una ciudad portuaria, no busque más, Marsella es el lugar para estar. Además, Marsella se beneficia de un clima mediterráneo la mayor parte del año. Así que podrá disfrutar de veranos calurosos y secos entre junio a agosto y de temperaturas suaves el resto del año. Con FranceRent podrá aterrizar en el aeropuerto de Marsella Provenza y luego ser trasladado en coche privado hacía el casco antiguo de la ciudad.

Artículos relacionados

Cargando, por favor espere